La punción seca es una técnica de fisioterapia que se utiliza para tratar zonas lesionadas colocando agujas en los puntos de gatillo o grupos musculares afectados. Es muy recomendable para lesiones, sobrecargas o tensiones musculares.

La punción seca es una técnica invasiva de fisioterapia que se emplea para reducir los dolores musculares ocasionados por lesiones o sobrecargas. Consiste en colocar finas agujas (similares a las de acupuntura) en los puntos de gatillo de la zona muscular afectada.

Las sesiones de punción seca deben hacerse cada 3 o 4 días, dejando tiempo suficiente entre sesiones para la recuperación muscular. Tras unas cinco sesiones es probable que ya veamos los resultados y nuestro músculo esté recuperado.

La técnica de punción seca ofrece una gran mejora desde la primera sesión, pero lo ideal es aplicar unas 5 sesiones para garantizar los resultados. Tras este tiempo se valorará si es necesario continuar o cambiar el tratamiento.